lunes, 6 de septiembre de 2010

de Ana Granado-Lincoln

Politica

Radiografía del IOMA
Movimientos políticos en la obra social que maneja $ 5 mil millones
Los cambios en el directorio reforzaron la conducción de La Scaleia, aunque su antecesor Javier Mouriño mantiene cierta influencia. Profesionales de carrera, que se desempeñan en el organismo, alertan por las tercerizaciones. Quién es quién en la obra social más importante de la Provincia.
Una de las dependencias claves de la administración pública bonaerense es, sin dudas, el Instituto de Obra Médico Asistencial (IOMA), tanto desde el punto de vista político como económico, que muchas veces van de la mano.
En el presupuesto 2010 figura que esta institución tiene un presupuesto asignado de $ 3.800 millones, aunque profesionales de carrera consultados por Hoy, que se desempeñan desde hace años en el organismo, aseguran que es muy superior. “Por mes, acá no se manejan menos de $ 400 millones y eso da un total, por año, de $ 5 mil millones (alrededor de US$ 1.200 millones), lo que es superior al presupuesto total que tienen varias provincias”, aseguraron las fuentes consultadas. El IOMA actualmente cuenta con 1,5 millón de afiliados obligatorios y otros 235 mil voluntarios.
Desde principios de año, el IOMA es conducido por Antonio La Scaleia, que reemplazó a Javier Mouriño, que dejó la conducción de la obra social para ocupar el lugar de José “Pepe” Scioli en la Secretaría General de la Gobernación.
En realidad, desde los años ‘90 La Scaleia está vinculado a la obra social, y ha sabido acomodarse a los cambios de gestión en la Provincia, con los gobiernos de Eduardo Duhalde, Carlos Ruckauf, Felipe Solá y, actualmente, Daniel Scioli. Durante ocho años, el paraguas político fue el que le proporcionó el vicegobernador, Alberto Balestrini, que le permitió caminar por la floja cuerda de la gestión pública sin caerse. Ya en el año 2000, su cargo era visible: manejaba la estratégica Dirección General de Prestaciones del IOMA, que, según la jerga que suelen utilizar los empleados del organismo, es una de las cajas más importantes de la obra social.
En 2002, La Scaleia llegó a la Municipalidad de La Matanza. Era el tercer año de Balestrini como intendente del distrito más poblado de la Provincia. Durante cuatro años fue asesor del Municipio, donde trabajó muy cerca del entonces secretario de Salud y actual ministro nacional del área, Juan Manzur. Y trascendió, en esas funciones, al gobierno del propio Balestrini, que en 2005 dejó la intendencia en manos de Fernando Espinoza y mudó sus influencias a la presidencia de la Cámara de Diputados de la Nación. El apoyo que le dio Balestrini le permitió asumir como vicepresidente del IOMA en 2007.
Luego del ACV que el vicegobernador sufrió hace meses, que aún lo tiene luchando por su vida, el “Tano”, como le dicen al titular del IOMA, demostró que todos los años de rosca en la obra social le permitió adquirir vuelo propio. “Sin duda, es la persona que más sabe sobre el IOMA, todo lo bueno y todo lo malo; como así también todos sus secretos”, dijeron fuentes consultadas por Hoy.
Dentro de la estructura de la obra social, hay tres funcionarios que pisan fuerte junto a La Scaleia: Javier Goñi, actual vicepresidente del organismo, ex jefe de Gabinete del Ministerio de Salud; Daniel Burgos, que viene de desempeñarse como titular de la Dirección General de Salud del Servicio Penitenciario Bonaerense, y actualmente es el jefe de Gabinete de la obra social; y Alejandro Víctor Fernández, actual director general de Administración, que fue director de Contabilidad de Salud del organismo durante la gestión de Mouriño y que seguiría teniendo línea directa con el actual secretario general de la Gobernación.
A ellos se les suma una funcionaria con línea directa con La Scaleia: Claudia Marcela Brolese, a cargo de la Dirección de Relaciones Jurídicas.
La continuidad y las tercerizaciones
“La actual gestión está demostrando una continuidad de lo que fue la gestión de Javier Mouriño (actual secretario general de la Gobernación). Se están extendiendo las tercerizaciones, y ya ni siquiera se hacen las auditorías externas de las internaciones que consistían, básicamente, en mandar profesionales a las clínicas para comprobar que las personas que dicen estar internadas, lo estén realmente”, le dijo a Hoy Idelmar Seillant, el presidente del Sindicato Unico de Profesionales, Trabajadores y Técnicos del IOMA. Se trata de una entidad, de reciente creación, que reúne básicamente a los profesionales auditores del organismo. “Somos alrededor de 500, especialmente médicos y abogados. Y desde hace años nos tienen contratados, cuando tenemos la responsabildidad de controlar todos los trámites que se hacen en la institución”, afirmó. En ese sentido, desde esta entidad aseguran que a varios profesionales, que se niegan a firmar trámites viciados de nulidad, no se les renueva los contratos o son desplazados de sus lugares de trabajo. En varias ocasiones, incluso, recurrieron a la Justicia, que en todos los casos falló a su favor.
También sostienen que “la obra social está siendo desfinanciada”. “Actualmente, se les da cobertura social a 40 mil personas que reciben pensiones graciables, que no aportan ni nunca aportaron. Esta situación puede llevar a un desfinanciamiento del organismo, porque no se están previendo los recursos correspondientes”, alertó Seillant.
Diario Hoy