viernes, 5 de septiembre de 2008

at. Diputado Sebastián Cinquerrui

(en la foto: Capaccioli llegó de la mano del ex jefe de gabinete Alberto Fernández a cargo de cajero oficial
de las campañas electorales del oficialismo)


la justicia apura la investigación a capaccioli
A buen recaudador, muchas preguntas
El fiscal Comparatore considera que hay elementos para investigar al superintendente de Servicios de Salud por “tráfico de influencias” a fin de conseguir dinero para las campañas políticas del kirchnerismo.

Según el fiscal Luis Comparatore hay elementos suficientes para investigar por “tráfico de influencias” a Héctor Capaccioli, el superintendente de Servicios de Salud de la Nación, en su rol de recaudador de las campañas kirchneristas. El martes, el fiscal firmó el requerimiento de instrucción que dio lugar a la denuncia de la Coalición Cívica por las sospechas sobre el origen del dinero aportado por algunas droguerías, incluida Seacamp, que pertenecía a Sebastián Forza, uno de los asesinados en el triple crimen de General Rodríguez.El funcionario aparece involucrado en la causa por su doble rol: por su cargo está vinculado con las obras sociales –que podrían haber recolectado dinero para la política proveniente de las droguerías– y, además, participó desde 2003 en la organización del financiamiento de las campañas del kirchnerismo. Aunque los delitos por los aportes los investiga la justicia electoral, se instruye una causa penal en la que se investiga si el dinero de estas droguerías es legal y si Capaccioli les ofreció a esas empresas algún beneficio por aportar fondos a la candidatura de Cristina Kirchner.Esta investigación, una suerte de rompecabezas jurídico, quedó a cargo del juez Ariel Lijo. Intentará determinar si las droguerías o sus dueños tuvieron algún beneficio del Estado después de sus aportes. Lijo pidió ayer la composición societaria de todas las empresas denunciadas para conocer los nombres de todos sus propietarios y los posibles vínculos con el Gobierno. El viernes, Sebastián Javier Cinquerrui, diputado bonaerense de la Coalición Cívica, ratificó una denuncia por posible tráfico de influencias entre algunas de las empresas aportantes a la campaña del Frente para la Victoria y “quien sería el recaudador de la campaña, Héctor Capaccioli”, según consta en la declaración frente a Lijo. Esta causa es el primer resultado judicial de los cruces entre las droguerías de funcionamiento irregular y los aportantes a las campañas K.Seacamp, que pertenecía a Forza, aportó 200.000 pesos para la fórmula Cristina Fernández-Julio Cobos, “pese a su insuficiente solvencia patrimonial y a diversos reclamos judiciales en su contra”, figura en la denuncia que desde ayer comenzó a instruirse a pedido del fiscal Comparatore.La investigación tendrá como eje uno de los argumentos que los legisladores observaron en su planteo judicial: el aporte del rubro farmacéutico y médico para la campaña representó más del 35% de los fondos que recaudó Capaccioli para el Frente para la Victoria. Son 4.512.000 millones de pesos.El juez Lijo y el fiscal Comparatore comenzarán a recorrer la ruta de ese dinero. “Resulta insoslayable investigar las contrataciones y procesos adjudicatarios celebrados con anterioridad y posterioridad a la elección, para corroborar o descartar la existencia de posibles beneficios indebidos originados por la participación de las mencionadas empresas del sector como aportantes a la campaña presidencial”, consta en la denuncia que ayer fue avalada por el fiscal.En una ampliación de esa denuncia, que Cinquerrui y el diputado nacional Fernando Sánchez aportaron al juez la semana pasada, también solicitaron que se investigue la posibilidad de que los fallecidos Forza y Ariel Vilán, también aportante para la campaña del oficialismo, hayan sido utilizados como testaferros de otras personas o empresas.