domingo, 24 de octubre de 2010

C.N.S.T(Comisión Nacional Salvemos al tren)

24 DE OCTUBRE DE 2010

TREN PARA TODOS ENTRE RÍOS
Unión Ferroviaria: ¿Mafiosa coincidencia?
El pasado miércoles 20 quedará en la historia de las luchas obreras argentinas... Donde aún -en pleno siglo XXI- se esgrimen tanta injusticia, tanta violencia, tanto abuso y descontrol de los unos contra tanta bronca, tanta impotencia y tanto dolor de los otros. Ya no son los "Ramón Falcón", los "teniente coronel Varela" o los "comisario Franchiotti", etc. Hoy son los "patovicas de las empresas concesionadas" por el menemato. "Trabajadores agremiados del viejo sindicalismo en decadencia que responden a los intereses patronales y a los de sus gordos capomafias del sindicato". Supuestos obreros atacando (y matando) a otros obreros, estos últimos paridos en el macabro laboratorio montado en los `90s con las privatizaciones, concesiones, tercerizaciones, etc. y que tuvo su máximo logro con la infame "banelco", o sea la flexibilización laboral. Algo que ya existía en los hechos pero que, como país serio que queríamos ser, debía transformarse en ley por aquello de la seguridad jurídica con la que siempre machacó la derecha vernácula goriloide .
En el ojo de la tormenta un sindicato muy singular: la UNIÓN FERROVIARIA de José Pedraza. Sí, Pedraza, el mismo que "entregó" a miles de ferroviarios -que quedaron en la calle- a comienzos de los `90s, al que Menem le cedió en pago por su patriótica tarea el ferrocarril Belgrano Cargas, aquel que permitió el cierre del policlínico ferroviario central en Retiro y tantos otros en el interior del país, ese que veranea en lujosos hoteles de Brasil y el Caribe con la guita que genera la Unión Ferroviaria, un sindicato con muy pocos afiliados (gracias a Menem, Cavallo y Pedraza) pero con suficientes "perros fieles" capaces de tomar las armas para enfrentar a aquellos pobres desclasados que pretenden luchar por conquistar derechos laborales básicos, los del artículo 14 bis, relacionados con la constitución justicialista de 1949 (cap. III, art. 37, inc. I) y con el Gral. Perón, el mismo que aparece en el cuadro grande del despacho de Pedraza.
Pero si hubo algo que nos sorprendió profundamente fue que ese fatídico miércoles 20 por la mañana -pura casualidad quizás- fuimos citados a la sede local de la Unión Ferroviaria, ya que, tiempo atrás, habíamos solicitado autorización para realizar una asamblea de ex-ferroviarios para debatir, entre otros temas, la marcha del proyecto ferroviario provincial y la solicitud de una audiencia a las autoridades de la UEFER y al gobernador Urribarri. Grande fue nuestra sorpresa al conocer la respuesta de las autoridades de la Unión Ferroviaria seccional Entre Ríos, con sede en Concordia. Resulta que los patovicas regionales de la Unión Ferroviaria descargaron contra nosotros municiones de distinto calibre buscando justificar la negativa de la cesión del local a un puñado de “viejos ferroviarios” que sólo pretendía participar en la llamada “vuelta de tren” a los ramales entrerrianos.
Se adjunta la pésima e injustificable respuesta de la gente de la Unión Ferroviaria de Concordia.
Sergio Gustavo Martinoli
bogiesmartinoli64@gmail.com